La adopción del cloud computing va a pasar a ser una realidad inminente para todas las organizaciones en algún momento; de ahí la necesidad de que tu empresa esté preparada y sepas cómo realizar de forma correcta, y sin márgenes de error, la migración de datos a la nube.
En la actualidad, el 39% de las empresas ha migrado la mitad de sus cargas de trabajo a la nube, y se espera que, en los próximos meses, esta cifra aumente hasta el 58%, según el informe Cloud Security Report de Fortinet.
La adopción del cloud computing va a pasar a ser una realidad inminente para todas las organizaciones en algún momento; de ahí la necesidad de que tu empresa esté preparada, y sepas cómo realizar de forma correcta, y sin márgenes de error, la migración de datos a la nube.
¿En qué consiste la migración de datos a la nube?
La migración de datos a la nube es el proceso de transferir datos desde sistemas locales o infraestructuras tradicionales hacia entornos de computación en la nube, aprovechando los servicios y recursos proporcionados por proveedores de servicios en la nube, como Google Cloud.
En este sentido, la migración permite una gestión y un almacenamiento más eficiente de los datos, así como un acceso remoto y una escalabilidad mejorada. En términos técnicos, la migración de datos a la nube involucra varias etapas y consideraciones:
En primer lugar,se debe realizar un análisis exhaustivo de los datos existentes en el entorno local de la empresa para determinar qué datos cumplen con los requisitos de seguridad y privacidad necesarios y son adecuados para la migración. Con este análisis, también se puede identificar las dependencias entre los diferentes conjuntos de datos y las aplicaciones que los utilizan.
Una vez que se ha realizado el análisis, se debe proceder a diseñar una arquitectura adecuada para la migración de datos. Esto incluye seleccionar el modelo de implementación en la nube (nube pública, privada o híbrida) y elegir los servicios cloud específicos que se van a utilizar, por ejemplo: almacenamiento, bases de datos, análisis de datos y servicios de seguridad.
Después, se debe continuar con la preparación de los datos para la migración. Hay que asegurarse de que los datos están estructurados de manera adecuada y cumplen con los requisitos de formatos y estándares necesarios para el entorno de la nube. En este punto, también es importante garantizar que los datos estén limpios y libres de redundancias o inconsistencias que puedan afectar su integridad o calidad.
De manera paralela, se tiene que establecer las landing zones en la nube. Las zonas de aterrizaje son entornos configurados específicamente para recibir las primeras cargas de datos migrados, actuando como un punto de entrada controlado y escalable. Estas arquitecturas, que se diseñan de acuerdo con las mejores prácticas y directrices específicas de la nube en la que se van a implementar, se componen de diferentes elementos y servicios cloud. Por ejemplo, en el caso de la nube de Google Cloud Platform, una landing zone podría incluir los servicios de Google BigQuery para el almacenamiento y análisis de datos, Google Cloud Dataflow para el procesamiento de datos, Google Cloud Dataproc para ejecutar cargas de trabajo de Apache Hadoop y Spark, entre otros.
Una vez que se han preparado los datos y se han establecido las landing zones, se debe iniciar el proceso de transferencia hacia la nube. Para ello, es necesario el uso de herramientas especializadas que facilitan la migración, como servicios de transferencia de datos en línea o herramientas de copia masiva. En esta etapa, hay que garantizar la integridad y la seguridad de los datos durante el transporte, utilizando técnicas de cifrado y protocolos de comunicación seguros.
Tras realizar la migración inicial, se debe verificar la integridad y la consistencia de los datos recién alojados en la nube. Para ello, hay que realizar pruebas profundas para garantizar que los datos se hayan transferido de forma correcta y que los servicios en la nube estén funcionando de manera adecuada. También, hay que establecer mecanismos de respaldo y de recuperación ante posibles fallos o pérdidas de datos.
Tipos de datos que se pueden migrar a la nube
Para un proceso de migración de datos a la nube exitoso, es fundamental tener un conocimiento sólido de los diferentes tipos de datos que se pueden migrar. Esto permite elegir los procedimientos y las soluciones cloud adecuadas para el almacenamiento, procesamiento y análisis de datos.
Datos estructurados: tienen un formato predefinido y siguen un esquema o modelo específico, como las bases de datos relacionales. Estos datos se componen de tablas con filas y columnas, lo que permite realizar consultas y análisis mediante consultas SQL. Al migrar datos estructurados, se pueden utilizar servicios de almacenamiento y bases de datos en la nube, como Google Cloud SQL, que ofrece una infraestructura escalable y gestionada para almacenar y controlar estos datos.
Datos no estructurados: estos no siguen un formato predefinido y no se organizan en tablas o esquemas fijos. Aquí se incluyen datos de archivos de texto, documentos PDF, imágenes, archivos de audio y vídeo, redes sociales, correos electrónicos, entre otros. La migración de datos no estructurados requiere la actualización de servicios de almacenamiento escalables, como Google Cloud Storage, y herramientas de procesamiento y análisis de datos, como Google Cloud Dataflow, para extraer insights de valor.
Datos de aplicaciones empresariales: son aquellos generados por sistemas y aplicaciones utilizadas en el entorno empresarial, por ejemplo: sistemas de gestión de relaciones con clientes (CRM), sistemas de gestión de recursos empresariales (ERP) y sistemas de gestión de bases de datos (SGBD). Estos datos pueden ser tanto estructurados como no estructurados y, para migrarlos a la nube, se debe considerar las necesidades específicas de cada aplicación y utilizar servicios y herramientas especializadas en garantizar una migración y operación fluida de los datos, como servicios de bases de datos en la nube y servicios de integración de aplicaciones.
Datos de sensores y dispositivos IoT: son producidos por sensores y dispositivos de internet de las cosas. Suelen ser datos no estructurados que se generan en grandes volúmenes y a una alta velocidad. Estos datos pueden incluir información sobre la temperatura, la humedad, la ubicación, entre otros. Para migrar datos de sensores y dispositivos IoT a la nube, se debe utilizar una infraestructura escalable y servicios específicos para el procesamiento en tiempo real de estos datos.
Datos de registros y bitácoras de servidores, aplicaciones y sistemas: también conocidos como logs, son registros de eventos generados por servidores, aplicaciones y sistemas. Estos datos suelen ser no estructurados y se utilizan para el monitoreo, la resolución de problemas y el análisis de rendimiento. Para migrar estos datos a la nube, se puede utilizar servicios específicos como Google Cloud Logging, el cual se encarga de la recolección y el análisis de logs de forma centralizada.
Datos de copias de seguridad y recuperación ante desastres: son datos críticos de las empresas que se utilizan para garantizar la disponibilidad y la integridad de los datos en caso de fallos o desastres. Para migrar estos datos a la nube, se pueden utilizar servicios cloud que proporcionen durabilidad y redundancia, como Google Cloud Storage. También, se deben implementar estrategias de replicación y respaldo automatizado para garantizar la disponibilidad y recuperación de los datos en caso de una interrupción del sistema.
¿Qué aporta la nube a tu organización?
Estos son algunos de los beneficios que la nube puede aportar a tu organización:
Escalabilidad y flexibilidad: los recursos se pueden escalar de forma rápida y sencilla, lo que permite adaptarlos en tiempo real a las necesidades cambiantes de tu empresa.
Reducción de costos operativos: la nube elimina la necesidad de invertir en hardware y componentes informáticos costosos, lo que reduce los gastos de infraestructura, mantenimiento y personal técnico.
Acceso remoto y trabajo colaborativo: el personal puede acceder a los datos y aplicaciones desde cualquier lugar y en cualquier momento, lo que facilita la colaboración y el trabajo en equipo, especialmente en entornos distribuidos o con equipos remotos.
Mejor seguridad y protección de datos: los proveedores de servicios en la nube ofrecen medidas de seguridad avanzadas, como el respaldo automatizado y la replicación de datos, para garantizar la continuidad de tu negocio en caso de fallos.
Actualizaciones y mantenimiento automatizados: los proveedores también se encargan de realizar las actualizaciones y el mantenimiento de la infraestructura cloud, liberando a las empresas de estas responsabilidades. Esto garantiza que las aplicaciones y los servicios estén siempre actualizados y funcionen de manera óptima.
Integración con otras aplicaciones y servicios: con la nube, es posible conectar y combinar diferentes aplicaciones para compartir datos, lo que permite la interoperabilidad entre todos los sistemas.
Análisis avanzado de datos: se tiene acceso directo a herramientas y servicios de análisis de datos avanzados, como aprendizaje automático y análisis predictivo, que permiten extraer información valiosa y obtener conocimientos significativos a partir de los datos.
Menor dependencia de infraestructura física: al migrar los datos a un entorno cloud, la empresa ya no tiene dependencia de una infraestructura física ni la necesidad de administrar y mantener servidores y equipos locales.
Acceso rápido a nuevas tecnologías: en la nube, se puede acceder de forma rápida a herramientas de Internet de las cosas (IoT), inteligencia artificial (IA), big data, blockchain, etc. Gracias a ello, es posible estar a la vanguardia de la innovación tecnológica.
Cumplimiento normativo y legal: al migrar los datos y las cargas de trabajo a la nube de un proveedor especializado, se garantiza que se cumple con los estándares de seguridad y de privacidad de datos a nivel nacional y de la Unión Europea.
¿En qué consiste un plan de migración de datos y con qué recursos se debe contar?
Como se ha mencionado, un plan de migración de datos a la nube es un enfoque estratégico y técnico que establece las pautas y las etapas necesarias para transferir datos desde sistemas locales a un entorno cloud. Este plan detalla los objetivos, las actividades, los recursos y las responsabilidades asociadas con la migración, incluyendo el análisis de datos, la selección de servicios en la nube, la preparación y transferencia de datos, así como las pruebas y validaciones.
En este sentido, el plan considera los riesgos, los plazos, los costes y las métricas a tener en cuenta para garantizar una migración exitosa y minimizar interrupciones en las operaciones comerciales.
En cuanto a los recursos necesarios para una migración de datos a la nube con éxito, destacan los siguientes:
Infraestructura de red: una conexión de red confiable y de alta velocidad es esencial para transferir los datos de manera eficiente entre los sistemas locales y la nube. Hay que asegurarse de que haya suficiente ancho de banda y baja latencia para evitar retrasos significativos durante la migración.
Almacenamiento en la nube: se necesitan servicios de almacenamiento en la nube para alojar y gestionar los datos migrados. En este sentido, se debe seleccionar la cantidad adecuada de capacidad de almacenamiento y elegir servicios de almacenamiento compatibles con los requisitos específicos de los datos, por ejemplo: almacenamiento en bloque, almacenamiento de objetos o almacenamiento de archivos.
Herramientas de transferencia de datos: se debe contar con herramientas especializadas para facilitar la transferencia de datos desde los sistemas locales a la nube. Esto incluye servicios de transferencia de archivos en línea, protocolos de transferencia segura (como FTPS o SFTP), servicios de replicación de bases de datos o herramientas de copia masiva.
Herramientas de migración y transformación de datos: es posible que sea necesario utilizar herramientas de migración y transformación de datos para preparar los datos para su migración a la nube. Con estas herramientas, se pueden limpiar y estructurar los datos, ajustar los formatos y los esquemas, y garantizar la integridad y la consistencia de los datos durante la migración.
Servicios de seguridad y cifrado: para garantizar la protección de los datos durante la migración, hay que utilizar servicios y protocolos de seguridad adecuados. Por ejemplo, se puede usar el cifrado de datos durante la transferencia, la autenticación de usuarios, el acceso basado en roles y servicios de seguridad avanzados proporcionados por el proveedor de la nube (firewalls, monitoreo de eventos, detección de intrusiones, etc.).
Herramientas de monitoreo y gestión: durante la migración, también es necesario que se supervise y controle el proceso de migración de datos, así como que se diagnostiquen y solucionen problemas en tiempo real.
Personal técnico capacitado: uno de los aspectos más importantes para una migración sin márgenes de error es contar con personal técnico especializado. Estos profesionales deben tener un conocimiento profundo de los sistemas locales, de los servicios en la nube y de las mejores prácticas de migración. Su experiencia facilita la planificación, implementación y solución de problemas durante todo el proceso de migración. Algunos de los roles más utilizados para estos casos son los siguientes:
Gerente de proyecto
Arquitecto de sistemas
Analista de datos
Especialista en ciberseguridad
Desarrolladores de software y programadores
Equipo de soporte técnico
Las mejores prácticas para las migraciones de datos
A continuación, te brindamos una serie de recomendaciones para realizar una migración de datos exitosa:
Utiliza únicamente las herramientas y tecnologías más adecuadas para tu tipo de migración. Debes seleccionar las soluciones que se ajusten 100% a los requisitos específicos de la migración que quieres realizar. Utilizar herramientas no adecuadas podría resultar en la pérdida o corrupción de datos, tiempos de inactividad prolongados y costos adicionales para corregir los problemas surgidos durante la migración.
Mantén una comunicación efectiva, constante y fluida entre los equipos de migración (internos y externos). Para ello, debes involucrar a los usuarios finales, los responsables de la toma de decisiones, los representantes de tu proveedor cloud y otros equipos relevantes. Una comunicación deficiente produce una desalineación de expectativas, errores en la migración de datos, insatisfacción de los usuarios finales y retrasos en el proyecto debido a problemas no resueltos.
Capacita a tu personal sobre el uso y gestión de los datos en la nube. Es fundamental que proporciones una capacitación adecuada al personal involucrado en la migración y posterior gestión de los datos en la nube. En estos casos, acceder a una consultoría en transformación digital garantizará que el personal comprende cómo acceder, utilizar y gestionar los datos en el nuevo entorno Cloud. Ten en cuenta que el uso incorrecto o ineficiente de los servicios en la nube debido a falta de capacitación puede conducir a la exposición de datos sensibles, un mal uso de los recursos de la nube y un bajo rendimiento de las aplicaciones.
Establece políticas de respaldo y recuperación ante desastres. Por ejemplo, define los intervalos de respaldo, los procedimientos de recuperación y las pruebas periódicas de los procesos de respaldo y recuperación. Sin este tipo de políticas, estás haciendo que tu empresa se arriesgue a una pérdida irreversible de datos y a que tenga la incapacidad de recuperarse de cualquier tipo de desastre.
Incentro es Premier Partner de Google desde hace más de 11 años, lo que nos convierte en especialistas reconocidos en toda España en la migración de datos hacia esta nube. Si los datos de tu organización se encuentran en tus sistemas locales o, incluso, en otras nubes, en Incentro te ayudamos a migrar todas tus cargas de trabajo hacia la nube más eficiente, sostenible y segura del mercado: Google Cloud. Si quieres desarrollar un plan de migración de datos altamente efectivo, te invitamos a contactar con nosotros, estaremos encantados de acompañarte en este proceso.