Los artículos sobre la aplicación de la Inteligencia Artificial (IA) y el Aprendizaje Automático (ML) sobre los datos llevan meses, incluso años, siendo ineludibles en tu timeline de LinkedIn. Y que estas capacidades te ofrecen grandes oportunidades en cuanto a obtención de información en tiempo real, previsiones y mucho más... también lo sabes ya.

¿Y si echamos un vistazo a la base de datos de tu organización? Quizás se te pongan los pelos de punta, porque para poder manejar los datos de forma innovadora, tu base de datos debe estar limpia y en orden. ¿Te preocupa este punto? Entonces descubre aquí qué pasos puedes dar para optimizarla.

A nuestros expertos en datos les encanta pensar contigo. ¿Cómo lo hacemos? Basándonos en nuestro Modelo de Madurez de Datos. Este modelo determina el grado de madurez de los datos en tu negocio y lo que hay que hacer para pasar al siguiente nivel.

Los criterios se subdividen en Estrategia, Personas, Procesos, Tecnología y Datos, y le ofrecen herramientas claras para comenzar. ¿Quieres saber si eres un Explorador de Datos, un Usuario Consciente o un Usuario Avanzado? ¿Y cómo puedes aprovechar mejor las oportunidades que ofrecen los datos?

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Acabamos de mencionar la capacidad de predicción y los datos en tiempo real, pero es muy probable que esto esté en el largo plazo para tu organización. Puede que actualmente la manera en la que estáis utilizando los datos sea muy sencilla, a través de unos cuantos informes mensuales generados en Excel por departamento con algunos datos del CRM y con métricas de las redes sociales, pero poco más.

O puede que a veces pruebes alguna herramienta de generación de informes, de la que pronto te cansas debido a los numerosos mensajes de error. En resumen: la calidad de los datos es insuficiente y falta mucha información relevante.

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Seguramente eres muy consciente de las oportunidades que se están perdiendo en tu negocio. Y que el salto a la IA y el ML desde el punto en el que te encuentras es demasiado grande. Cómo se ha llegado a este punto tampoco importa, pero sin duda es hora de hacer algo al respecto. Eso sí, hazlo con cabeza, porque si vas demasiado rápido y te saltas pasos, pronto podrías estar más lejos de lo que estás ahora.

Además, este enfoque no sólo afectará a la gestión de los datos, sino también a las personas, los procesos y los sistemas de tu organización. Por tanto, lo primero es lo primero: estos son los principales pasos hacia una base de datos sólida en tu empresa.

Parece obvio, pero esta es la clave de todo. ¿Quieres utilizar los datos estratégicamente en el día a día de tu empresa? Entonces necesitas recopilar, almacenar y enriquecer los datos correctamente. Esto significa pensar qué datos necesitas como mínimo para crear buenos informes financieros u obtener información sobre determinados procesos. Así que pregúntate:

  • ¿Qué quiero conseguir?

  • ¿Cómo pueden ayudarnos los datos?

  • ¿De dónde pueden obtenerse esos datos?

Asegúrate de que tienes una fuente segura para cada dato y de que estos se almacenan de forma lógica, porque más adelante querrás hacer algo con ellos. Asegúrate de que esas fuentes puedan vincularse entre sí, así evitarás tener grandes cantidades de datos a los que no poder darles valor.

Los datos ya no son un "extra": no es algo que un experto en marketing o un auditor utilice por su cuenta. Para trabajar en serio con ellos, hay que designar responsables competentes. Y si no se dispone de esos conocimientos internamente, tendremos que buscarlos.

Piensa en especialistas de datos dentro de tu departamento informático, porque si no, pronto tendrás todas las herramientas listas para empezar a trabajar, pero nadie sabrá cómo sacarle partido a todo esto. Consejo: coloca tu relación de datos del paso uno junto a los conocimientos que tienes en tu empresa. ¿Hay suficientes conocimientos para cada fuente de datos y herramienta, o ha llegado el momento de buscar nuevos perfiles?

Por supuesto, no has recopilado estos datos sólo para observarlos. Y claro, algún día el objetivo será pronosticar un año en un abrir y cerrar de ojos a partir de tus cuadros de mando dinámicos y vistosos. Pero aún no hemos llegado a ese punto. Ahora tienes tus datos disponibles y agrupados y es hora de establecer pequeñas conexiones entre toda esta información. Para ello, debemos sentar a la mesa a las personas apropiadas y decidir cómo vamos a interpretarla. Ya tienes la información, pero ¿qué significa todo esto? ¿Y qué vas a hacer con ello?

Estos son los tres ingredientes básicos que se necesitan para tener una base de datos correcta. Por supuesto, esto se desglosa en muchos más elementos, como herramientas de análisis y elaboración de informes, el almacenamiento, los enlaces, la arquitectura, los procesos y mucho más. Podríamos alargarnos hasta el infinito.

¿Estás empezando a marearte? ¿Entiendes lo que decimos pero ahora no sabes muy bien cuál debe ser tu siguiente paso? Nuestros expertos en datos estarán encantados de pensar junto a ti. ¿Cómo lo hacemos? Basándonos en nuestro Modelo de Madurez de Datos. Éste determina el grado de madurez de los datos de tu organización y lo que necesitas hacer para pasar al siguiente nivel.